RECITAL DE RELATOS
Cómo cada año ha llegado la Navidad al CRPS Fuencarral, y tenemos la suerte de inaugurarla compartiendo nuestros escritos bajo el lema de…
¡¡HISTORIAS DE NAVIDAD!!
¡¡Muchas gracias a todos por vuestra entrega y participación!!
Cómo son muchas propuestas hemos seleccionado seis, os las facilitamos para que podáis leerlas y disfrutar de ellas.
Votad aquella que más os haya gustado. GRACIAS!!
Aunque fuera de concurso, nos gustaría compartir y hacer mención honorífica al relato:
UNAS NAVIDADES ENTRE SENTIDOS
¡Bruno!… ¡Está nevando!… ¡Es Navidad!… La madre de Bruno se lo explicaba juntando sus manos entre las suyas con sus caricias tiernas y didácticas…
Bruno respondía con otra caricia a su madre preguntando ¿Mamá a que sabe la Navidad?…
La madre de Bruno dibujando en sus manitas le respondió…. La Navidad sabe a manjares ricos hechos con mucho cariño…Inmediatamente las manos de Bruno tocaron algo blandito y esponjoso lleno de blanca harina….
La madre de Bruno volvió a cogerle de las manos y le dijo: ¡Haremos un roscón de Reyes!…
Al cabo de un tiempo cuando el roscón había salido del horno y estaba reposando, Bruno buscaba la presencia de su madre para preguntarla… ¿Mamá a que huele la Navidad? La madre de Bruno volvió a cogerle la mano y Bruno formuló su pregunta, a lo que su madre respondió con sus peculiares caricias en las manos que hacían de Bruno un niño feliz y risueño ya que sentía esas cosquillitas en la piel que le comunicaban con el mundo exterior.
La madre de Bruno contestando a su pregunta le dijo: Bruno vamos a salir a la calle para que sientas la fría nieve cayendo y vamos al puesto de las castañas asadas que tanto te gustan…
Entonces Bruno tubo la sensación de oler, de tocar y de degustar el manjar de castañas calientes con su olor a ascuas y su calor que le trasmitían a sus manos…
Bruno imaginó entonces que la Navidad olía a castañas asadas en invierno frio…
Cuando llegaron a casa Bruno y su madre con la nieve fría en sus ropas habían pasado un buen día y Bruno volvió a buscar las manos de su madre para seguir preguntando…
¡Madre! ¿Por qué es bonita la Navidad si no puedo ver? La Navidad es bonita por que se hacen regalos y el regalo más precioso que me ocurrió en Navidad fue tu nacimiento y ver tu cara linda… y la madre acarició la cara de Bruno…
Bruno en su curiosidad volvió a acariciar la mano de su madre y la preguntó ¿Cómo suena la Navidad? …Su madre se puso a buscar en un antiguo baúl instrumentos musicales….
Volvió a acariciar sus manos y le dijo: en Navidad se escucha los sonidos de los villancicos y dándole una pandereta le enseñó con sus manos a reconocer su textura y a que hiciera sonidos, aunque Bruno no los oyera…El sonido era bastante ensordecedor pero lo que Bruno sentía era el calor en las manos y unas pequeñas vibraciones que respondían de la pandereta…
La madre de Bruno dijo que ella llamaba a ese instrumento Luna llena de pergamino y que los niños lo tocaban zarandeándola y recibían a cambio pequeñas monedas redondas como la luna llena, pequeñas lunitas ponían en sus manos correspondiendo a un aguinaldo….
Y la madre de Bruno dirigió sus manos hacia las monedas que fueron colocadas en la palma de las manos de Bruno… Tú también tienes tus pequeñas lunitas como aguinaldo…. Entonces Bruno dibujó en su rostro una gran sonrisa como si cada cosa que tocara fuera mágica…. Su sonrisa era muy natural y su mirada puesta en el infinito volvió a reclamar las manos de su madre y entre caricias le dijo, gracias por estar conmigo… y los ojos de la madre se llenaron de lágrimas…Su madre estaba feliz y Bruno también era feliz, y ambos se dieron cuenta de que la mejor Navidad del mundo era construirla juntos…
Y comiendo roscón de Reyes y tocando las panderetas un mundo de sensaciones hizo que esa Navidad Bruno consiguiera abrir su mundo interior al mundo mágico que formaban él y su madre… Esa Navidad que se siente con los cinco sentidos….
Eva C.